
Santiago del Estero | Gendarme misionero detenido por amenazar con prender fuego una clínica
Exigía que le den alta médica para regresar a su puesto de trabajo
La Justicia santiagueña investiga a un gendarme misionero detenido la semana pasada tras amenazar de muerte y con incendiar una clínica de salud mental si no le otorgaban un certificado de alta inmediato de la patología por la que llevaba cinco días de tratamiento.
De acuerdo a los informes del diario El Liberal de Santiago del Estero, fue una médica psiquiátrica quien presentó en la comisaría Primera de la capital provincial una denuncia formal contra un suboficial de Gendarmería Nacional, misionero de 34 años, luego de que amenazara de muerte a enfermeros y distintos profesionales de la salud y provocara destrozos en varias dependencias.
Según se precisó, el pasado miércoles 23 de julio al mediodía se radicó la denuncia que resalta que el gendarme violento padece de “heteroagresividad, excitación psicomotriz e ideas delirantes de tipo paranoia y antecedentes de consumo de cocaína”, entre otros trastornos.
El diario El Liberal informó ayer que el misionero -el día mencionado como de mayor temor- comenzó a tornarse muy agresivo, con amenazas recurrentes a los profesionales del establecimiento, a los efectivos de seguridad y a los gritos amenazar con prender fuego la institución.
Exigía que le den alta médica para regresar a su puesto de trabajo. Afirmaba que su voluntad era suficiente para que le otorguen el certificado.
Como respuesta a los motivos y razones que le facilitaron los responsables de la clínica, el cabo de GN comenzó a arrojar objetos en su habitación y a romper todo lo que su fuerza le permitía. Gritaba también que los medicamentos que le brindaron no tenían ningún efecto favorable y que no había recibido asistencia de acompañamiento y de seguridad. En la historia clínica se asentó que este tipo de episodios los protagonizaba de manera intermitente.
Cuando la policía recibió la denuncia se comprobó que el misionero era el mismo que, pocos días antes de esta internación de la que buscaba irse, irrumpió con violencia en un sanatorio privado donde su expareja estaba por dar a luz.
En ese lugar también causó incidentes dramáticos por lo que fue llevado a una clínica de salud mental pública en la localidad de El Polear, próxima a Santiago del Estero capital.
Los efectivos lograron comunicarse con el padre del gendarme, quien manifestó que tenía una derivación para una clínica de salud mental en Misiones para estar más acompañado por sus familiares.
El traslado estaba bajó análisis y decisión de la fiscal de Instrucción Penal, “Delitos Comunes”, Belkis Alderete, quien ordenó la detención en la comisaría mencionada bajo la decisión a su vez del juez de Control y Garantías, Héctor José María Salomón.