
“Lo peor aún no llegó”
Empresarios anticiparon más recesión y alertaron por la pérdida de empleo
Empresarios del norte del país describieron un escenario industrial de gran preocupación y sin señales de mejora. El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) del Chaco, Aldo Kastón, sostuvo: “No veo ninguna esperanza positiva para el año que viene. Estamos regalando un país que sigue siendo rico pero del que se están llevando todo”. Mientras que, otros dirigentes advirtieron que “lo peor aún no llegó”.
Kastón planteó que las pymes enfrentan impuestos elevados mientras compiten con productos importados que ingresan con ventajas. “¿La famosa reconversión que nos piden, hacia dónde es? El Estado debería decirnos hacia dónde va el país porque hoy no sabemos ni con quién tenemos que competir”, afirmó. Además, cuestionó la falta de un rumbo económico que dé previsibilidad al sector.
El dirigente chaqueño también analizó el mensaje reciente del presidente Javier Milei durante su visita a esa provincia. “Nos pide que aguantemos, pero ¿para qué? ¿Cuál es la promesa?” expresó. En este sentido, advirtió que cada semana cierran empresas y que la industria no encuentra condiciones para recuperarse.
Kastón señaló que la paralización de la obra pública dejó sin actividad a numerosas firmas que dependían de esos proyectos. Lamentó que no existan señales de reactivación y reiteró su visión pesimista para el futuro cercano. “No están generando nada que nos permita pensar que esto va a mejorar”, agregó.
Denuncian caída del consumo y un futuro “sin esperanza”
Desde La Rioja, el vicepresidente de UNIR, Juan Carlos Serrano, reafirmó la gravedad del panorama. El empresario sostuvo en diálogo con medios locales que existe “una pérdida progresiva de puestos de trabajo, constante y silenciosa”. Describió que las industrias reducen personal sin despidos masivos, pero con un deterioro permanente del empleo formal.
Serrano señaló que las empresas evitan usar al personal como variable de ajuste y buscan sostener los equipos de trabajo. “A veces, uno tiene que mirar a la cara a su gente y decirle que no tiene trabajo para darle”, manifestó. En consecuencia, advirtió que la profundidad de la recesión obliga a decisiones dolorosas.
El empresario también alertó sobre los riesgos que enfrenta la Industria Nacional si la economía no muestra cambios. Ante esta situación, aseguró que “lo peor aún no llegó” y señaló que numerosos análisis internos anticipan un escenario más complejo tras las elecciones de octubre. Agregó que, de confirmarse esas proyecciones, la actividad productiva enfrentará meses muy difíciles.
Por otro lado, el titular de la UIA de Salta, Eduardo Gómez Naar, coincidió en el diagnóstico. “Los consumos han caído fuertemente y los precios están deprimidos”, expresó. Además, planteó que su provincia tiene recursos valiosos pero sufre la falta de crédito, inversiones y obras de infraestructura.
Gómez Naar remarcó que la recesión se profundiza y que la cadena de pagos muestra señales de tensión. “Estamos en un momento súper crítico y todas las empresas están complicadas porque venimos de una recesión profunda”, afirmó. Lamentó que la reactivación esperada no se materializó y advirtió que muchas personas ya están perdiendo sus trabajos.